Día de Reyes. Es la fecha elegida para iniciar los octavos de final de la Copa del Rey. Un derbi madrileño aguardaba en Vallecas entre el Rayo y el Atlético de Madrid. Ante un ambiente desapacible saltaban los dos equipos a la cancha con la intención de conseguir un buen resultado de cara al partido de vuelta.
La afición colchonera se hizo notar mucho y no paró de alentar en todo momento. La hinchada local estuvo más apagada que de costumbre. Continúa el ambiente enrarecido en el equipo de la franja pero los jugadores consiguieron no darle importancia y centrarse en el juego. Y lo hicieron muy bien. El Rayo Vallecano recuperó la intensidad de partidos atrás y logró incomodar a un Atleti que no era capaz de trenzar dos jugadas seguidas de peligro. Marchaba el encuentro en un tono calmado cuando Nacho engatilló un disparo imparable cercano a la base del poste tras un rechace. Un golazo que ponía a los vallecanos en ventaja y casi obligaba a los de Simeone a hacer un gol para tener la eliminatoria de su lado. Los de Jémez tenían un resultado buenísimo de cara a la vuelta pero no se conformaron, no faltaron a su esencia.
La entrada de Vietto al descanso fue clave en el desarrollo del partido. Le dio otro ritmo y dinamismo al equipo. A balón parado, el laboratorio del Cholo seguía funcionando y llevaba peligro en cada acción aunque sin convertir. Torres seguía desaparecido y Thomas era el que ponía la alegría en el cuadro rojiblanco. Corría el minuto 67 cuando Vietto regatea en la banda derecha, penetra en el área y la pone atrás para que Saúl haga el empate de un buen disparo abajo que pilla a contrapié al portero. Empate a uno y objetivo cumplido del Atleti, marcar fuera de casa. A partir de ahí hubo más emoción. Ambos buscaban otro tanto. El Rayo mandó un balón al larguero y Juan Carlos evitó el segundo de los visitantes con una parada antológica casi en la línea. Los de Jémez siguieron fieles a su pensamiento y terminaron el partido atacando, sin miedo. Es su carácter.
La vuelta la próxima semana en el Calderón, promete emociones fuertes. El Rayo no se va a esconder y aunque el resultado es ligeramente favorable al Atlético, Simeone es consciente del peligro y no va a bajar un ápice de intensidad. La Copa es la Copa.
Juan Lorenzana Prieto
@juanlp91