Foto cedida por Roberto Juárez @RobertoJuJi

El líder de la segunda división B visitaba el sur de Madrid para medirse al Fuenlabrada en el Fernando Torres con la esperanza de poder continuar tranquilo en lo más alto de la tabla de la categoría de bronce en el grupo II, tras la victoria del inmediato perseguidor, el Castilla en Zubieta. Los madrileños, por su parte, buscaban acercarse a los puestos de playoff, de los que les separan 7 puntos, y seguir en la buena línea de las últimas jornadas.

Foto cedida por Roberto Juárez @RobertoJuJi

El Fuenlabrada empezó realmente bien, buscando balones a la espalda de la defensa vizcaína con un Jorge Ortiz haciendo de las suyas por el carril derecho. Se hacía imposible para el líder parar la habilidad del extremo y recurría a continuas faltas para ello. El delantero Matas tuvo la más clara en otro balón a la espalda que le dejó solo contra el portero pero definió demasiado cruzado. Los azules seguían arrinconando al rival, que apenas conseguía salir de su propio campo. Poco a poco se fueron igualando las cosas. Los de Fernando Morientes disminuyeron el ritmo y comenzó una batalla en la mitad de la cancha. De nuevo constantes interrupciones hacía que el encuentro decayera en calidad. En el minuto 31, el Barakaldo se adelantaba en su única llegada por medio de un penalti. Era totalmente injusto pero sabemos como se las gasta el ‘Baraka’ y la cantidad de partidos que ha ganado así, siendo rocoso, rascando y aprovechando sus oportunidades. Los locales no daban de sí para protestar las decisiones del colegiado. Las tarjetas siempre caían del bando local mientras que los que pegaban eran otros. El Fuenla continuaba llegando con peligro hasta que Antonio Matas fusiló desde dentro del área la escuadra izquierda para hacer el empate. Una buena primera parte con 1-1.

El árbitro parecía querer cambiar su idea a la hora de sacar las tarjetas en la reanudación.

Foto cedida por Roberto Juárez @RobertoJuJi

Cada acción del Barakaldo fuera de tono era, esta vez sí, sancionada con tarjeta amarilla. Jorge Ortiz mantenía su línea de volver loco a cualquier rival que se le pusiera enfrente y tuvo una buena ocasión desde la frontal del área que atrapó el guardameta visitante. Dominaban el balón los madrileños ante un equipo vasco que se defendía con orden y buscaba el gol en alguna contra. Así la tuvo en el minuto 75, una doble ocasión que se marchaba alta. Hubiera sido demasiado castigo para un buen partido de los pupilos de Morientes, que no se conformaron nunca con el empate. La salida de Alaín en los visitantes dio otro aire al cabeza de familia del grupo II y con el llegaron los mejores minutos en ataque de su equipo. Matas la volvió a tener para poner el segundo pero su disparo salió muy centrado e intervino bien el portero. Destacar también el buen partido de Dani Guillén en el lateral zurdo, quien se mostró como un muro infranqueable y apoyó las llegadas en acción ofensiva. En el último suspiro, Matas tuvo el 2-1 y el Barakaldo disfrutó en el contraataque de una ocasión de oro para llevarse los tres puntos. Ninguna entró y el vibrante partido finalizó 1-1.

Juan Lorenzana Prieto

@juanlp91