
Foto:La presse
Volvió la noche de magia en Turin. La noche que cualquier jugador quiere vivir, cualquier aficionado quiere soñar, cualquier niño espera pasar durante su infancia. Es la Champions League, la competición más importante del mundo. Hoy en el Juventus Stadium se respiró un aire diferente, aire de empresa, de corazón, de coraje. Ante el equipo de Allegri estuvo la armada alemana del Bayern Munich, equipazo de estrellas con capacidad técnicas y económicas inalcanzables para la mayoría de los conjuntos de todo el planeta.
Los equipos se enfrentaron luchando, sudando y corriendo tras cada pelota como si fuera la más importante de la vida entera. ¨Bianconeri¨ y ¨bavaresi¨ dieron vida a un espectáculo unico, con goles, emociones y intensidad hasta la silbatazo del arbitro.
La doble ventaja del equipo de Guardiola con los goles de Mueller ( irregular dado que Lewandoski al momento del disparo del alemán se encontraba en una posición que molestaba Buffon) y el magnifico gol de precisión de Robben parecían matar al conjunto de casa. Pero, si algo caracteriza los equipos italianos, es seguramente las ganas de luchar, de no rendirse y arriesgar , encontrando muchas veces milagros deportivos.
Así fue, dado que la Juve empezó a jugar a su manera, con la sangre en los ojos comió literalmente al Bayern cerrándolo en su mitad de campo. Como un león herido que intenta de correr detrás una víctima, en un primer momento cortó la distancia con la jugada combinada entre Mandzukic y Dybala, con el argentino que cara a cara con Neuer no falló la posibilidad de dar nuevamente esperanza a la gente de fe ¨juventina¨. A continuación, fue el italiano Sturaro a dejar sin voz los espectadores del Stadium, regalando a la escuadra de Turin el empate y la hazaña para la vuelta en el Allianz Arena.
Stefano Sturaro representó totalmente el espíritu de la ¨Vecchia Signora¨. Jugador que ve con rareza el campo, hoy entró e hizo la diferencia, destacando entre los ¨actores de Hollywood¨ del Bayern, presionando y comiendo hierba con la voluntad de un guerrero.
Esta actuación representó una verdadera esperanza no solo para la Juve, si no para el futbol italiano en general. Las otras ligas europeas en estos años podrán gastar más, atraer personajes e inversionistas más importantes, pero, cuando se trata de hablar de juego, de futbol y sobre todo de Champions, Italia estará siempre presente y subirá la voz en cualquier lugar de Europa.
Federico Titone
@fedetitone